Tercera parte. Si deseas ver la primera parte y también la segunda parte.
En la década de 1920 el uso de la fotografía comenzaba hacerse necesaria en documentos de identificación en nuestro medio, popularizándose los retratos de busto en presentaciones de ovalo y cuadrada en tamaño que comúnmente llamamos cédula que corresponde a 3 cm. de ancho por 3 y ½ cm. de alto, que pronto llegaron a los turnos acompañados de vistoso diseño gráfico y alta calidad de impresión, añadiéndose como elemento indispensable en ellos el año a utilizarse el impreso.
En el turno para cargar la procesión del Jueves Santo 1 de abril de 1920 ya se utilizó también la separación del color, utilizando un hermoso cordón dorado para enmarcar el retrato ovalo de Jesús Nazareno de Candelaria, derivado de su Consagración tomado por José García Sánchez. La rotulación del mismo deja el carácter rígido para seguir la figura central representado por la imagen.
Ilustraciones 9 A y 9 B.
Vista frontal y reverso del turno para cargar en la procesión de Jesús Nazareno de Candelaria el Jueves Santo 1 de abril de 1920. Turno del álbum de Jesús Nazareno de Candelaria del licenciado Erick Espinoza Folgar.
En el reverso se presentó aquel año impreso el número de turno y brazo para cargar la procesión, así como el sello de la Tipografía Ortiz y Arévalo como encargadas del diseño e impresión de los turnos evidenciando el nacimiento formal del diseño industrial de estas tarjetas. No menos importantes son los datos puestos a mano que corresponden al nombre del devoto y el horario que debía cubrir la Velación del Señor el día Miércoles Santo.
Extraído de la investigación del Lic. Fernando Urquizú en “Los turnos de las procesiones de Guatemala, el caso de los de Jesús Nazareno de Candelaria (1903-2010)”