Por: Carlos Bianchi
Jamás lo hubiera pensado…. Jamás pensé ni en mis más remotos pensamientos desear ser un animalito y si alguna vez lo hubiera considerado jamás hubiese sido una lagartija, pero después de ver tu cruz Señor.
Se ha despertado este deseo en mi corazón, y es que no habría para mi honor más grande que estar cerca de ti y más en el momento en que por causa de mis pecados tu estabas dejando toda tu humanidad por mi, por mi salvación, por mi vida.
Seguramente hubiera intentando llegar hasta tu hombro, si ahí donde estaba recayendo todo el peso del madero a causa de mis pecados, hubiese intentando lamer tus heridas, para aliviar en algo todo el suplicio que por mi causa estabas viviendo.
Pero ahora que reflexiono y veo la grandeza de la salvación, te doy gracias Señor porque me hiciste un hombre como tú, menos en el pecado, y a través de ese sufrimiento me permites hoy entrar hasta el sagrario, el lugar más santísimo, y estar tan cerca de ti como quiera.
Jamás lo hubiera pensado antes de ver tu cruz Señor Jesús de la Merced.