Anécdota de: Cielo Bances
Tengo una anecdota con Jesús del Consuelo, yo perteneci por 5 años a la hermandad de la Virgen de Dolores de la Recoleccion y en el año 2001 el matrimonio de mis padres estbaa atravesando por serios problemas.
Mmi madre por cuestiones economicas se habia ido a trabajar a Estados Unidos y mi padre solo pasaba peleando y maldiciéndonos a mis hermanos y a mí; ese dia recuerdo que el sábado antes de la velación de Jesús del Consuelo mi padre había llegado insultado mientras yo planchaba mi capa.
Al día siguiente llegué 30 minutos antes de la hora que nos habían citado, claro muy triste por lo que esta viviendo en mi casa llegué donde esta el Santísimo y con Jesús del Consuelo a rezar y llorar.
Entre mi llanto le decía que aquí (con Él) era el lugar donde yo quería estar las 24 horas con él; que ya no quería llegar a mi casa, que sentía que a nadie le importaba y me sentía como si ya no tenía un padre.
Lloraba con tanto sentimiento y con mis ojos cerrados, cuando sentí un olor muy fuerte a incienso, como si alguien me hubiese abrazado. Abrí mis ojos y lo primero que vi fue la dulce mirada de Jesús del Consuelo, lo que para mi habría sido sin duda la respuesta de que Dios en su infinto amor siempre estará para mí.
Son muchas la situaciones en las que Dios me ha demostrado o respondido a mis oraciones, por ello le guardo un cariño inmenso a su imagen por el como a marcado de manera tan especial en mi vida.
¿Que vivencia tienes tu para contarnos? envíanosla en nuestra sección de anécdotas.