Anécdota: de Gerardo Rodas.
La primera vez que la vi, la contemplé y no podía dejar de verla: es Reina con un dolor tan marcado en su mirada y gesto; tiene un rostro de compasión que al verla causa dos senciones en mi dolor y la otra de temor de Dios.
Al verla también no soporto y comienzo a llorar, es una imagen que realmente después de la Soledad de Santo Domingo, muestra su dolor y que a diferencia de otras imágenes, ella nos muestra su dolor de forma exterior; es como si te dijera «hijo no peques más, mira mis lágrimas, mira mi dolor, mira tus pecados que llevaron a mi Hijo a morir por ti y el mundo entero que ¿acaso no te basta verme así y ver a mi Hijo ensangrentado para que tu no Pagaras tus pecados?» .
Ella es una Madre, que si uno se inca o se sienta a platicar con ella te responde, es cierto que dirán que es una imagen, si lo es, pero la Reina del Cielo te habla a través de su imagen ¡La Reina de la Escuela de Cristo» el verla conmueve.
Ella para mi no es sólo una imagen, es como la foto de mi Madre y reina de cuando estaba ese primer Viernes Santo y me hace cosientizarme de cómo está mi vida con Dios, que mal o que bien he actuado. Ella te hace entrar en ese estado de cargo de conciencia, en ese estado de ponerte a pensar y recapacitar en un cambio de vida , aparte ella te da consuelo al verla y te da compasión.
En mi caso, también me dan ganas de correr a su cintura y abrazarla, Ella te hace sentirte como un niño, por que te hace ver que has echo mal o bien como ya lo dije; pero también te hace sentir Amado por ella y es ese sentimiento en el cual la Soledad de la Escuela de Cristo te convierte en niño y ella se transforma en una Madre tierna.
¡Para mi, la imagen de la Soledad de la Escuela de Cristo es una de las más hermosas del Mundo!
¿Qué sientes tu al ver a la Soledad de la Escuela de Cristo? ¿Te ha pasado algo con ella? cuéntanos y publicaremos tu anécdota en el sitio.