La Hermandad cuenta con un Himno al Señor Sepultado de Santo Domingo, este himno está fechado en el 26 de febrero del año de 1929 y fue redactado por el Hno. Leopoldo Castellanos y Larrave.
Texto copiado del Himno al Señor Sepultado de Santo Domingo:
CORO
¡Hermanos! ¡de rodillas! ¡Jesús en la Urna está!
¡Le dieron nuestras culpas su Muerte y su Pasión!
¡Pidámosle contritos al vernos su piedad,
que otorgue a nuestras almas, su santa Redención!
VOZ
Por tu Sangre Preciosa derramada
en la cumbre del áspero Calvario
por tu agonía santa y prolongada,
por tus Siete Palabras en la Cruz,
veamos, Señor, la luz de tu mirada;
que libres nuestro espíritu del error;
caridad alimenten nuestros pechos
y Tú los llenes de infinito amor.
Te abandonamos ¡ay! ¡te perseguimos!
Nuestros pecados ¡ay! Te laceraron,
y más que los azotes que te dimos
y más que la corona que en tus Sienes
con las manos impías te pusimos
aún te duele, Señor, cual te clavaron
vernos que: ingratos, a nosotros vienes,
¡Nosotros a mirarte no acudimos!
Dejamos en el Gólgota a María,
sola con el Apóstol del amor
y la gran Pecadora en compañía,
mientras huimos nosotros con terror.
Llega ahora, el momento, Padre y Rey,
en que gimiendo junto a ti de hinojos,
te pidamos perdón, llenos los ojos,
de lágrimas, de fe y de contrición.
L.C y L
Hermano del Señor.
Fuente: Caballeros del Señor Sepultado HSS/ Facebook
Cesar Augusto Hernandez Cisneros cuenta: «En la década de los 90’s llegó a mis manos la partitura de este bello y devoto himno, lo entregué en sesión a junta Directiva y saqué una fotocopia para mi.
Lo interesante es que dice en el encabezado: para ser interpretado por el coro «Cristo Rey’. La única explicación lógica que encuentro es que, en esos años el coro de la hermandad se denominaba así.
Cabe recordar que antes del Concilio Vaticano II, la Hermandad del Señor Sepultado tenía a su cargo el culto a la imagen de Cristo Rey que está en la 1ra.capilla norte del templo y que salía en procesión un domingo de octubre (me parece que el 2do.), antes de la última modificación del calendario litúrgico.
De este dato no hay documentos pero si testigos presenciales de avanzada edad que lo recuerdan con especial cariño.
Por último, esta bella imagen de Cristo Rey es original del taller de Olot, España de donde provienen nuestros amados pasos.»