Anécdota de: Anónimo.
Recuerdo muy bien aquel lejano Viernes Santo 2013. Primera vez que cargaba al Santo Cristo Yacente del Calvario.
Luché para conseguir el turno; recuerdo tenía el turno 37. Llegué a formarme con lágrimas en mi rostro emocionado por cargar.
Un señor ya grande de edad me preguntó cuántos años llevaba de cargar y le respondí «es el primer año». Le pregunté cuántos años tenía él de cargar y me respondió que 45.
Charlamos y cuando ya venía cerca la procesión me dijo: «pídale al Yacente del Calvario y Reina de la Paz algo de corazón y se lo dará en menos de 15 días».
Tomé mi almohadilla, el brazo 1 y lo cargué con emoción; lloré porque anhelaba cargar en el calvario. Terminó el turno y el señor me dijo «bendiciones hermano se recordara de mi toda su vida».
En mi turno pedí de corazón por mi trabajo. A la semana siguiente me llaman de la empresa diciéndome que tenía entrevista; mi gran sorpresa: ese mismo día me confirmaron plaza.
Doy mi testimonio del gran amor que agradecimiento que tengo por el Cristo Yacente del Calvario y la real señora de viernes santo la Reina de la Paz.
Hasta la fecha sigo cargando y camino la procesión desde que sale hasta que entra. Muchas gracias.
¿Qué testimonio tienes tu para contar? al compartir tu anécdota, cada corazón cucurucho fortalecerá su Fe y tú serás instrumento de Dios para que cada día cambiemos nuestra manera de ver nuestra devoción.