Anécdota enviada por: James Paredes
Mi experiencia fue en el inicio de la Semana Mayor del año 2014, en el sábado anterior a Ramos con Jesús Nazareno del Consuelo. Ese día colaboré en la procesión del ‘Niño Jesús de la Demanda’ por el cual me habían invitado a cargar el turno 33, pero no pude llegar porque era eso de las 6 de la tarde y salí de la Iglesia de la Merced a las 7 pm, teniendo positivismo me fui a cambiar de cucurucho a traje de calle y me incorpore al cortejo por el Parque Central, en la 5av. y 6ta. Calle.
Comencé a intentar cargar hablándoles a los señores de cambio de turno, pero era imposible; los turnos llenos, los devotos llegaban a tiempo a su turno. En el turno 49 solicite nuevamente el permiso para poder cargar pero de nuevo me dijeron que estaba lleno y que de aquí en adelante era muy difícil que pudiera cargar entonces en mi cabeza dije: “Jesús del Consuelo tú quieres que te cargue, dame la oportunidad de poder cargar en este turno por favor”, tenía 2 años de no cargar a Jesús del Consuelo y anhelaba llevarlo en hombros.
En ese momento se me acercó un joven alto, al que yo le llamo ‘ANGEL’ y me dijo: “disculpa tenés turno”, le respondí: “no, no tengo”; a lo que él me respondió: “mirá, ¿podés cargar este turno?, es que la persona que se lo iba a dar no va a venir y se va a perder”. Acepté el turno y le pregunté: “¿cuánto es?” él me dijo: “no es nada”; y se retiró a cargar su turno.
El turno que me regaló fue el turno 50, marcha “El Arrepentimiento”, me quedé con la boca abierta, casi lloraba de la emoción después de intentar e intentar. Así Jesús del Consuelo me dio la oportunidad de llevarlo en hombros y esto nunca lo olvidaré, Dios me hizo ese milagro, mi Nazareno del Consuelo me bendice siempre, y que Él los bendiga mucho hermanos cucuruchos.
¿Qué te ha pasado a ti con Jesús del Consuelo? Envíanos tu anécdota, y nosotros la publicaremos en el sitio: