Por: Dr. Edwin García, colaborador especial de Cucurucho en Guatemala.
Durante muchos años los vecinos del barrio de Gerona, perteneciente a la parroquia de Santo Domingo, habían solicitado que el santo entierro recorriera las calles del sector en su procesión de Viernes santo. Juntas directivas pasaban y ninguna puso oídos a la petición.
A finales de 1985 mientras se discutía el recorrido para 1986 salió a colación el tema del barrio de Gerona, una petición firmada por muchos vecinos respaldaba la misma. Luego de varias sesiones en donde se discutió el tema se decide que para 1986 el cortejo dominico haga su paso por esa parte de su parroquia, luego vendría la discusión sobre la hora en que debía pasar, unos proponían que debía ser recién salida la procesión lo que conllevaba pasar por el parque central después de media noche, la otra propuesta era que se dejara Gerona para la parte final del recorrido como al final se dió con el acertado criterio de que sin importar la hora en que pasara, los devotos saldrían de sus casas a ver el paso del Cristo del amor.
Como todo cambio, este generó incertidumbre respecto a la respuesta de los fieles. Bajando el Señor la 12 calle se divisó a lo lejos una valla de personas con candelas en mano en la esquina de la 12 calle y 12 Avenida, el Presidente de la hermandad se adelantó a los ciriales en compañía de algunos directivos y colaboradores, las personas con velas en mano eran los vecinos de Gerona que salieron a dar la bienvenida al Señor sepultado de Santo Domingo agradecidos y felices de que por fin sus peticiones fueron tomadas en cuenta, el ambiente en el barrio era de alegría, el frente de las casas iluminadas y alfombras desde el ingreso por la 12 calle A hasta la salida por la 10a calle, fue algo inovidable.
El cortejo hizo su ingreso al barrio a las 11 de la noche y durante 2 horas bendijo a su paso los hogares de los fieles que esperaron por muchos años ese momento. Ante tal muestra de devoción y cariño, se decide que para 1987 vuelva el Señor a visitar su barrio, la única modificación que se hizo fue que los pasos no entraran a Gerona pues en el 86 fue muy dificultoso el paso por la linea del ferrocarril ya que las ruedas que tenían las carrozas eran muy pequeñas y no amortiguaban el golpe a la hora de cruzar la vía férrea.
Para 1988 la nueva junta directiva decide omitir el paso por Gerona y desde entonces no ha vuelto el Señor en un Viernes santo, solo lo ha hecho en algunas ocasiones para la velación de septiembre.