El pregón de Cuaresma y Semana Santa en Guatemala son por mucho artes del apostolado de esta tradición, así es como ha evolucionado el arte de lo impreso a lo digital
Antes que las redes sociales inundaran de oportunidades de comunicación a todos los medios existentes para informar, e incluso antes de la aparición de equipos de impresión personalizados, computadoras, etcétera, existían ya impresiones masivas que eran utilizados desde la revolución de la Imprenta de Gutemberg y desde luego que como todo fenómeno social, las procesiones y prácticas devocionales no fueron la excepción.
Antes que Facebook, antes que Instagram y Twitter, también antes que los grupos que se hacían en Yahoo ó MSN, el valor que la información que se publicaba en los “canceles” de los templos era enorme, era un publíquese y cúmplase que nadie ponía en duda sino más bien servía para conocer, a veces la repetición de algo que año con año sucedía o aun mejor: conocer los cambios, innovaciones y detalles novedosos que la actividad tan esperada para cada Cuaresma y Semana Santa tendría.
Es aún muy común ver en los antañones templos del Centro Histórico y principales centros de veneración, una galería de lo más variado, anunciando Velaciones y Procesiones.
Algunos tal vez recordarán como el Miércoles de Ceniza, en el diario Prensa Libre, se publicaba a full color, una página completa, con el Pregón de Cuaresma y Semana Santa de la Hermandad del Señor Sepultado de Santo Domingo… señal inequívoca que la temporada Cuaresmal había llegado.
Pero no solo era éste el Pregón de Cuaresma y Semana Santa que anunciaba la época y sus actividades… no… en cada rincón del país y acorde a las capacidades económicas o acceso a las diferentes tecnologías, se abrían los paquetes que contenían frescos y olorosos a tinta recién aplicada, con los cartelitos, afiches o pregones, que llenos de ilusión, eran pegados por delegados de cada Asociación, Hermandad y/o Cofradía, en las galerías o canceles de cada templo.
Con el paso de los años, éstas publicaciones fueron adoptando mayor detalle y calidad artística pues pasaron de ser información escrita importante a incluir verdaderas obras de arte en cuanto a diseño y fotografías.
Los pregones evolucionan a lo digital
Si bien es cierto, poco a poco hemos visto esta evolución artística muy positiva, también nos hemos encontrado con que se le ha puesto más atención a este aspecto y no se repara en detalles específicos y demandados por el devoto, como fechas, horarios, variantes, etcétera, que a veces también el devoto, aunque se los coloquen, parecen no ver y solo se enfocan en el arte… al final asunto de atención y comprensión.
Lo que sí es cierto y una bendición grande entre los aportes que hacen de nuestra Cuaresma y Semana Santa algo que representa mucho de lo bueno de Guatemala, es que cada año la calidad de los trabajos en pregones regala al devoto una magnífica oportunidad de contar con material impreso de calidad, que se complementa muchas veces con el resto de papelería que se imprime para la ocasión (turnos, programas de marchas, sobres, programas de mano, etc…) para conservar de manera gráfica la historia de tal o cual procesión, como fuente bibliográfica futura y como testimonio del ancestro que éstas prácticas tienen ante nuestra historia.
Por ello es importante que quien diseñe estas obras maestras cuente con un férreo apoyo de un ojo crítico y conocedor del lenguaje que habla el cucurucho (algo que no puede descifrar nadie más que no sea cucurucho) para que se logre transmitir todo lo que se deba informar y así cumplir con esa antigua función que tiene el Pregón de Cuaresma y Semana Santa: pregonar, comunicar, informar, anunciar, avisar, notificar.
No hay red social que vaya a lograr superar nunca el sentimiento de entrar a un templo y ver ya los afiches pegados en el cancel y tomar nota de los cambios o continuidad de tal o cual actividad cuaresmal. Eso es Guatemala, esa es nuestro sentir. Que así lo sea por siempre.