(texto original de Darwin Adolfo Hernandez Sapon)
Todo empezó un jueves de dolores por la noche estaba en mi casa compartiendo en familia, cuando un amigo me escribió y me preguntó sobre el alto que tengo para llevar en hombros una procesión; yo le respondí 47 y le pregunté la causa de su pregunta, me contestó que le habían informado que cambiaron el alto para la Entrada de la procesión de Jesús de Candelaria; no le puse mayor atención.
Era viernes de dolores y dispuse que después del trabajo iría a recoger mi cartulina; un amigo me dio ‘jalón’ y dispusimos ir al templo de Candelaria. Estaba afuera de la parroquia, preparé mi contraseña y la de mi hermano menor, para luego entrar al salón parroquial.
Llegué a la mesa 1, donde recogí mi turno y di la contraseña de mi hermano que estaba en la misma mesa; todo Cucurucho espera que le haya tocado «un buen turno» y así lo pensé. Con mi hermano menor siempre sacamos los turnos al revés, o sea de primero vemos la dirección del turno y luego le damos vuelta a la cartulina para ver el número de turno.
Vi la dirección de mi hermano y le tocó el turno cerca de la Recolección, luego ERA EL MOMENTO DE SACAR MI CARTULINA; yo me encontraba en el patio del salón parroquial, abrí el sobre y decía DE LA 1a CALLE AL DOCEL EN EL TEMPLO. Lo volví a leer y me dio un escalofrío tremendo, le dí la vuelta a la cartulina «Sangre de Cristo, guárdame para la vida eterna» y luego: ¡EXTRAORDINARIO DE ENTRADA! empecé a llorar, mucha gente que pasaba al lado mío me preguntaba si me sentía bien, lo único que les mostraba era la cartulina y entendían muy bien, la mayoría me decían «llorá porque Jesús de Candelaria da ese turno 1 vez en la vida».
Al llegar Jueves Santo, mis amigos decían que era un regalo; pasé el día acompañando a mi Cristo Rey todo el recorrido, pero ya llegando al ‘Arco de Correos’ ya los nervios me invadían. Llegó por fin el momento, eran la 12:15 am del viernes santo y estaba formado; tenía el brazo 112, llegó el anda y Jesús de Candelaria llegaba a su casa.
(espera, ahora dale play a la Marcha y sigue leyendo..)
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Sonó el timbre e inicia la Marcha Fúnebre de Chopin; me dio un escalofrío dentro de mi oración, empezó el viraje para entrar, escuché al timonel decir «YA LLEGAMOS MI JESUS», me conmovió tanto que empecé a llorar. Terminó la granadera… y lo que pasa después junto a ‘Una Lágrima’ es algo que no puedo describir, el interior del templo de Candelaria era un ambiente místico, un calorcito agradable se sintió al terminar el turno.
Los últimos hermanos que habían cargado el turno nos dimos un fraternal abrazo y todos llorando sin consuelo, JESÚS DE CANDELARIA ESTABA EN SU CASA, así me lo dijeron.
¡Vaya descripción de este Cucurucho! casi que me imaginé estar en su lugar en ese momento. Solo de pensar en la ternura y dulzura de la expresión del hermoso moreno nazareno de Candelaria, contrita cualquier corazón. ¿qué te ha pasado a ti con Cristo Rey o con alguna imagen de tu devoción? cuentanos:
Mira cuántas anécdotas entorno a Cristo Rey hay:
El niño que hizo la Alfombra más hermosa del mundo para Jesús de Candelaria
Lo hermoso que es Jesús de Candelaria ‘Cristo Rey’
No hay mejor turno con Jesús de candelaria y mi familia