DEL UNIFORME, CAMBIOS EN EL ITINERARIO Y EL ADORNO DE LA REINA DE LA PAZ
Noventa cargadoras impecablemente vestidas con el uniforme tradicional de las Dolorosas del Calvario. Blusas de mangas cortas, faldas arribas de la rodilla y ausencia de guantes negros, eran algo impensable. Y dicho sea de paso, vemos año con año cómo tan hermosa tradición se va debilitando.
Quizás el desconocimiento mezclado con la actitud desdeñosa de parte de las cargadoras, aunado a la falta de impulso y exigencia de parte de las Directivas, han provocado que el uniforme, calificado por algunos como un detalle irrelevante y por otros, como sello característico de la procesión de la Reina de la Paz, sea no acatado.
Dicho lo anterior, enfoquémonos en recordar la procesión de la fotografía que corresponde al Viernes Santo 28 de marzo de 1997. Como dato novedoso, fue la primera vez que la procesión del Santo Entierro pasó frente a la Municipalidad y al Seguro Social, tramo que fue suprimido en el año 2015.
Los que tuvimos la oportunidad de presenciar los decorados de ese año, quizás similares en impacto al de “El dragón” (1991) y “Los espejos” (1992), los recordamos como una colosal explosión visual de dorado llena de detalles dispuestos de forma bastante segura.
Y aunque fueron adornos hechos en su totalidad con materiales deleznables era evidente que demandaban una gran planificación y estudio. El anda de la Santísima Virgen, fue decorada bajo la misma estética con una disposición bastante despejada de sus elementos.
Destacaba la presencia de un dosel de cuatro columnas que enmarcaba a la Santísima Virgen tradicionalmente revestida con su traje de luto y adornada con corona imperial francesa y halo dorado.
Y aunque en gustos se rompen géneros, es innegable que el culmen de los adornos de El Calvario se encuentra en las décadas de los setentas y ochentas, en donde se encontraba el equilibrio entre un adorno elaborado con calidad, dignidad, decencia y la propiedad justa para representar el Santo Entierro de Nuestro Señor y la Soledad de su Madre Amantísima.