Entrar en la historia de La Hermandad del Santo Entierro de Izalco en El Salvador, permite que podamos compartir ese suceso que marcó para siempre a todos los devotos Izalqueños.
Cuando hablamos de Consagración de una imágen, muchos no podemos evitar que la textura de nuestra piel cambie. Para los que hemos estado presentes en una ceremonia tan bella, sabemos lo que en nuestro corazón significa. Ahora imagínate: Gracias al acceso que la Hermandad nos brindó para conocer parte de su historia, pudimos darnos cuenta que muchos socios pasaron alrededor de 15 años solicitando y exigiendo a la Junta Directiva iniciar el proceso para tan añorado acontecimiento.
Después de finalizada la Semana Santa del 2006, La Hermandad convocó a sus socios a una reunión para presentar el proyecto que enmarcaría la Consagración para el año siguiente, pero la reunión no pudo desarrollarse debido a que la asistencia fué solo de cinco hermanos. En una segunda convocatoria si se logró una asistencia significativa y con mucho entusiasmo por este gran reto se conformó un comité que se encargaría de planificar y desarrollar todas las actividades que girarían en el marco de la celebración. Conformaron el comité Carlos Antonio Ramón, William Mendoza Aguirre (Q.E.P.D.), Joaquín Antonio Torres, Francisco David Sarmiento, David Ernesto Mendoza, Fernando Ernesto Herrera, José Fernando Campos, Jorge Luis Tutila, José Alfredo Ramírez, Douglas Mauricio Cabrera, Hector Adolfo Rodríguez y Presbítero Pablo de Jesús Calderón.
El pueblo entero, al escuchar que por fín la bella imagen sería consagrada, comenzó a manifestar su deseo de ayudar para que la celebración se desarrollara con éxito. El 17 de febrero de 2007 se desarrolló el primer evento conmemorativo en el lugar conocido como «La ceibita» en el Barrio Santa Cruz, donde como cuenta la historia, fué en ese lugar donde la imagen entró por primera vez a Izalco. Reposando en un carruaje adornado de flores, partió de ese lugar a las 14:00 horas y cada devoto tuvo la oportunidad de apreciar de manera total su incomparable belleza. Terminado el pequeño recorrido a las 16:00 horas, el Presbítero Pablo de Jesús Calderón celebró la Santa Misa bajo esa ceiba que vió entrar 125 años atras a la imagen del Señor del Descendimiento en su llegada desde Guatemala.
Su Consagración: Era el día 3 de marzo de 2007, el día mas esperado por los izalqueños, día en que en La Iglesia nuestra Señora de Dolores, Moseñor José Adolfo Mojica (Q.E.P.D.) ungiría la imagen elevándola a la categoría de Consagrada. A las 15:00 horas fué levantada en hombros por una pequeña delegación la Imagen del Señor del Descendimiento bajo las notas de la marcha fúnebre «El Fackir». La Imagen no lucía ninguna vestimenta y así fué presentada al pueblo de Izalco. Luego de La Consagración, se desarrolló un magno concierto de marchas fúnebres a cargo de La Banda Regimental del destacamento Militar de Sonsonate. La imagen estuvo expuesta hasta las 20:00 horas para su pública veneración y la acompañó La Imagen de Jesús Nazareno.
Su Extraordinaria Procesión de consagración: Se desarrolló el 4 de marzo y fué acompañada por 36 hermandades invitadas, las cuales tuvieron el privilegio de llevar en hombros a la C.I. del Señor del Descendimiento. Acompañaron la procesión los Cristos de todas las cofradías y el guión de la comunidad indígena. Indumentarias diferentes de cada Hermandad que participó dieron un colorido jamás visto en la emblemática ciudad de Izalco. Algo que fué único es el acompañamiento de 7 bandas de música quienes entonaron marchas fúnebres al paso cadencioso de la procesión.