CULTO A LOS REYES MAGOS EN GUATEMALA
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HISTORIA DEL DÍA DE REYES
En la Sagrada Escritura el Evangelio sinóptico según San Mateo nos refiere lo siguiente en su capítulo 2, versos del 1 al 13:
“Cuando nació Jesús, en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén y preguntaron: «¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos su estrella en Oriente y hemos venido a adorarlo».
Al enterarse, el rey Herodes quedó desconcertado y con él toda Jerusalén. Entonces reunió a todos los sumos sacerdotes y a los escribas del pueblo, para preguntarles en qué lugar debía nacer el Mesías. «En Belén de Judea, –le respondieron–, porque así está escrito por el Profeta: «Y tú, Belén, tierra de Judá, ciertamente no eres la menor entre las principales ciudades de Judá, porque de ti surgirá un jefe que será el Pastor de mi pueblo, Israel»».
Herodes mandó llamar secretamente a los magos y después de averiguar con precisión la fecha en que había aparecido la estrella, los envió a Belén, diciéndoles: «Vayan e infórmense cuidadosamente acerca del niño, y cuando lo hayan encontrado, avísenme para que yo también vaya a rendirle homenaje». Después de oír al rey, ellos partieron. La estrella que habían visto en Oriente los precedía, hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el niño. Cuando vieron la estrella se llenaron de alegría, y al entrar en la casa, encontraron al niño con María, su madre, y postrándose, le rindieron homenaje. Luego, abriendo sus cofres, le ofrecieron dones, oro, incienso y mirra.
Y como recibieron en sueños la advertencia de no regresar al palacio de Herodes, volvieron a su tierra por otro camino.”
Manifestación de Cristo a los gentiles desde su nacimiento, que le buscan y le adoran en compañía de María su Madre, pronto se convirtió en una celebración para los cristianos.
FOTO 1. Los Santos Reyes Magos, patronos de El Tumbador, San Marcos.
A esta celebración la Iglesia desde sus inicios le llamó EPIFANÍA, que en griego significa manifestación. Esta manifestación inició su celebración en el primer cristianismo el día 06 de enero, en el cual también se celebraba el nacimiento del Hijo de Dios, su manifestación a los pastores, la manifestación a los Santos Reyes Magos a los que la tradición cristiana nos regaló el número de ellos, tres y sus nombres de Melchor, Gaspar y Baltazar, después del episodio narrado en los Evangelios, se dice que fueron discípulos de Cristo y murieron mártires en la primera persecución a los discípulos de Jesús resucitado. Sus reliquias descansan en la catedral de la ciudad de Colonia en Alemania.
El Papa Julio I en el año 350 de nuestra era promovió la celebración de la Navidad del Señor para el 25 de diciembre, es decir doce días antes de la Epifanía y así se estableció por su sucesor cuatro años después, por ende la Iglesia Católica Romana tomó esta celebración por separado, mientras los patriarcas de la tradición oriental siguieron celebrando la festividad del nacimiento y manifestación de Cristo a los pastores y reyes magos el mismo 06 de enero.
El culto a los Reyes Magos, con el traslado de sus reliquias a la ciudad alemana antes aludida, creció durante la Edad Media y también se les asignó una etnia humana específica y con un culto fuerte, vinieron los regalos a los niños de los hogares y a los sacerdotes el día 06 de enero por su representatividad a Jesús. Esta costumbre de regalos entró en el mundo cristiano hasta el siglo XX en el que fue desplazándose por la figura comercial de San Nicolás de Bari, transformado en Santa Claus.
FIGURA 2. Retablo e imágenes de los Santos Reyes Magos, que fueron del pueblo de San Gaspar Viviar, en las afueras de Santiago de Guatemala, hoy en el Museo de Arte de la Antigua Guatemala.
En Guatemala, el cristianismo se estableció por la evangelización venida con los primeros conquistadores del siglo XVI, las tradiciones y fiestas de la Iglesia Católica Hispana, unida a la de Roma se sembraron en el corazón y fe de los creyentes y es así como vemos los libros de bautismos de todos los pueblos plagados del nombre de Melchor (a), Gaspar (a), Baltazar (a) o Epifanio (a) a los niños y niñas que nacían el 06 de enero. Las personas con estos nombres también consta por testamento dejaban sus bienes o parte de ellos a la celebración de los Santos Reyes en las parroquias o iglesias cercanas a sus casas.
FOTO 3. Los Santo Reyes Magos, patronos de Cuyotenango, Suchitepéquez.
Cuenta el cronista inglés Thomas Gage que en los pueblos de Guatemala los indígenas acostumbraban bailar ante el nacimiento y el Niño Dios, sintiéndose ellos mismos como parte de esa revelación a los Santos Reyes, por medio de sus caciques, esto lo relata dicho fraile inglés hacía 1625.
Fue tal la devoción indígena a la Epifanía del Señor que existen pinturas novohispanas en que se ve un cuarto Rey Mago con aspecto de cacique americano.
FOTOS 4 Y 5. Epifanías guadalupanas: la Madre de Jesús nos trae a su Hijo a la América y las nuevas etnias y culturas la reciben y con ella a su Hijo. Los Reyes Magos pasan a ser los Reyes de España y los Caciques indígenas que conservan y llevan el cristianismo a sus pueblos.
En muchas localidades las cofradías y hermandades iniciaron a contar entre sus misas de precepto el día de la Epifanía y los Santos Reyes se convirtieron en santos patronos de muchos pueblos antiguos fundados entre los siglo XVI Y XIX en toda Guatemala, tales como San Gaspar Vivar, San Gaspar Chajul, Los Santos Reyes de Cuyotenango, Melchor de Mencos y Los Santos Reyes de El Tumbador. Se compuso en aquellos tiempos una piadosa novena en su honor, en la que se resalta el papel de los Santos Reyes como perfectos buscadores de Cristo y adoradores del mismo, una obra poética y llena de simbolismo teológico (como todas las novenas de su tiempo) invitando al devoto lector a que a imitación de los Santos Reyes, busque a Jesús, le encuentre en la Eucaristía con su Madre María y lo adore.
FOTO 6. Novena a los Santos Reyes Magos de composición e impresión hispano guatemalteca, en el museo del Libro Antiguo de la Antigua Guatemala.
No podemos evitar mencionar a nuestro santo de Guatemala por excelencia el Santo Hermano Pedro de San José Bethancourt, quien en su devoto ingenio, así como ideó la procesión de Nochebuena, antecesora de las actuales posadas, también inició la cabalgata de los Santos Reyes Magos, iniciando la devota procesión desde el convento de Nuestra Señora de las Mercedes hacia el Hospital de Belén en Santiago de Guatemala, en donde se cantaba en barrocas melodías las penalidades de los Reyes Magos en la búsqueda y encuentro con Cristo, así como el inminente peligro de Herodes. Una estrella luminosa compuesta con artificios humanos y luces de pólvora iluminaba el camino de los Santos Reyes, mientras que el Santo Hermano Pedro realizaba las oraciones y demás actividades piadosas en Santiago de Guatemala.
Foto 7. Personajes de la cabalgata de los Reyes Magos en San Marcos, libro manuscrito.
FOTO 8. LOS SANTOS REYES MAGOS EN SU TRADICIONAL CABALGATA EN SAN MARCOS, REPRESENTACIÓN DEL TEATRO POPULAR, PATRIMONIO CULTURAL DE LOS PUEBLOS, HOY PERDIDO.
Esta devoción pronto migró a los pueblos y con personajes del mismo poblado que aprendían sus papeles se catequizaba en una rica obra teatral, llena de valor cultural que se enriquecía según la cultura de cada lugar, así como una obra catequética de primer nivel, en la que participaba todo el pueblo espectador de la historia de los Reyes Magos y su visita al Niño Dios, estas cabalgatas se fueron perdiendo en casi todos los pueblos durante el siglo XX y hoy solo se pueden contar en las historias de los ancianos y en pocos lugares donde aún se hace como en San Luis Salcajá, Quetzaltenango. La frivolidad de los tiempos apuesta a cultos más centrados en procesiones, mientras que el barroco y su riqueza dramática está dando paso a otras formas…