La comunidad de la Rectoría de Santa Catalina que alberga a la milagrosa imagen del señor Sepultado «del hermanito Pedro» a invitado a los actos especiales que tendrán entorno a la Cuaresma 2024.
Aquí encontrarás:
Dentro del programa que tienen a bien realizar, es un viacrucis el cual recorrerá calles alrededor de la Rectoría. Y es de resaltar, que en la cuaresma 2018, este cortejo se realizó en donde se veía a varios sacerdotes realizando el sacramento de la confesión.
Por lo que no dudaríamos que pueda repetirse nuevamente, y por supuesto, que muchos cucuruchos y devotas podamos participar.
Horarios del viacrucis de Santa Catalina:
- Salida: 19:00 horas.
- Entrada: 22:00 horas.
Foto de portada: CucuruchoWeb.
Recorrido del viacrucis de Santa Catalina 2024:
La importancia de la meditación del viacrucis en Cuaresma
Meditar el viacrucis, un acto de piedad cristiano que rememora el camino de Jesús hacia su crucifixión y muerte en la cruz, constituye una práctica espiritual profunda y rica en significado. A través de esta devoción, los fieles siguen los pasos de Cristo en su Pasión, reflexionando en cada una de las estaciones que componen este camino de sufrimiento y entrega total.
La importancia de meditar el viacrucis reside en la oportunidad que ofrece para la introspección y el encuentro personal con el misterio de la redención. A medida que los devotos contemplan las catorce estaciones que narran eventos cruciales desde que Jesús es condenado a muerte hasta que es sepultado, pueden empatizar con el dolor y sacrificio de Cristo. Esta identificación con su sufrimiento les permite hacer un paralelo con sus propias cruces, esas dificultades y retos que afrontan diariamente. Así, el viacrucis se convierte en un espejo espiritual donde se reflejan nuestras batallas internas, y al mismo tiempo, ofrece un modelo de cómo enfrentarlas con fe y esperanza.
Meditar el viacrucis también tiene una dimensión comunitaria que fortalece la fe y la solidaridad entre los creyentes. Al realizar este ejercicio espiritual en grupo, durante la Cuaresma o en otras épocas litúrgicas, los cristianos comparten un tiempo sagrado de oración y reflexión. Esta práctica ayuda a construir y afirmar la identidad de la comunidad creyente, uniendo a sus miembros en un mismo sentir y propósito. En el acto de recorrer físicamente las estaciones, sea en una iglesia o al aire libre, los participantes vinculan su experiencia de fe al espacio comunitario y geográfico, lo que les permite vivir de manera más intensa la realidad del Evangelio en su cotidianidad.
Además, el viacrucis es una invitación a la conversión y un recordatorio de la naturaleza pasajera de la vida terrenal. Al reflexionar sobre la humildad, la paciencia y el amor incondicional que Jesús mostró en cada estación, los fieles son llamados a examinar sus propias vidas y buscar el camino de la virtud. La meditación del viacrucis resalta la importancia de perdonar, de amar al prójimo, y de llevar nuestras propias cargas con dignidad y esperanza. Es este aspecto penitencial lo que hace que el viacrucis sea especialmente relevante durante la Cuaresma, un tiempo para la renovación espiritual y la preparación para la celebración de la Resurrección.
Finalmente, meditar el viacrucis es un modo de oración que trasciende el tiempo y el espacio, uniéndonos con los fieles de todas las épocas y lugares. Al seguir su ejemplo, los cristianos de hoy en día se unen a la larga tradición de santos y mártires que encontraron en el viacrucis una fuente de fortaleza y consuelo. Este recorrido espiritual no solo honra la memoria de Jesús, sino que también inspira a los creyentes a llevar adelante su legado de amor y servicio al mundo, haciendo de sus vidas un testimonio viviente del Evangelio.