Ante cualquier circunstancia en la que la silla del Arzobispo quede vacante, existen varias modalidades que podrían utilizar para que un Obispo pueda tomar este puesto.
Una de ellas es que automáticamente el Obispo más antiguo, no de edad, suba como Arzobispo.
La otra alternativa es la reunión del colegio de obispos de la Arquidiócesis de Santiago de Guatemala y ser elegido por elección mayoritaria.
Esta última dependería directamente de la Santa Sede, ahí, su santidad el Papa Francisco tendría la decisión de nombrar entre los obispos de Guatemala para ocupar el cargo de Arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago de Guatemala.
Ésta última opinión es la que el arzobispado ha decido, y, aunque no se ha determinado el tiempo que la Santa Sede en el Vaticano tomaría la decisión, se ha considerado no mayor a 8 días.
A pesar de ello, estaremos pendientes de conocer al vigésimo Arzobispo Metropolitano de la Arquidiócesis de Santiago de Guatemala.