Saltar al contenido

Procesiones extraordinarias de Jesús de las Tres Potencias

Poporopoas_pinulito_septiembre

Procesiones extraordinarias con Jesús Nazareno
de la Escuela de Cristo con motivo de su traslación a la parroquia Vieja.

El agitado siglo XIX, el gobierno de Guatemala firmó dos tratados o “concordatos” con la Santa Sede. El primero estuvo vigente de 1852 a 1871, siendo éste el primer convenio celebrado entre El Vaticano y un país latinoamericano. El segundo tratado entró en vigencia a partir del 02 de julio de 1884 y fue firmado por el Cardenal Jacobini en representación de la Santa Sede y en nombre del Supremo Gobierno Liberal de Guatemala, firmó el padre Ángel Maria Arroyo.

Esta situación propició un aparente alivio y disminución de la persecución en contra de la iglesia, permitiendo a los clérigos actuar con más libertad en torno a sus actividades religiosas, al reconocerse finalmente por este acto la jerarquía eclesiástica, asignándose además un subsidio de $30,000.00 pesos al año, aporte que tuvo vigencia hasta el gobierno de don Manuel Lisandro Barillas cuya asamblea legislativa improbó el tratado.

Esta postura del gobierno de Justo Rufino Barrios y sus aparentes aires de libertad confesional que buscaban el apoyo popular en su propósito de reconciliarse con la Iglesia y otros grupos sociales con la finalidad de lograr el apoyo de todos los grupos en pro de la ansiada unión centroamericana, propiciaron el descontento e inconformidad en las líneas deliberantes en el partido liberal, a las cuales pertenecía el Licenciado Francisco Lainfiesta, Ministro de Gobierno y propietario de la tipografía “El Progreso” que había sido instalada en el incipiente y expropiado edificio en construcción de la casa conventual e iglesia de la congregación del Oratorio de San Felipe Rómulo Neri, La Escuela de Cristo, en la Nueva Guatemala de la Asunción, arrebatada a los padres por órdenes del mismo Presidente Barrios y entregada en propiedad y usufructo al Licenciado Lainfiesta, que en total desacato al Concordato de 1884, el 4 de agosto de 1884 procedió a desmantelar el techo de la iglesia al mismo momento en que oficiaba la misa el Presbítero don Alberto Rubio y Piñol, Rector del Colegio de Infantes, siendo los empleados de la imprenta quienes empezaron a desmontar el tejado del recinto religioso dejando caer basuras y tierra sobre el altar el cual fue protegido por los fieles con paraguas para evitar la sacrílega contaminación de las sagradas especies, comprendiendo los presentes que ese era el fin de la Orden Filipense y su Escuela de Cristo.

A consecuencia de lo anterior, las imágenes y otros enseres de la extinta Orden fueron trasladadas temporalmente a otras sedes eclesiásticas, entre ellas la iglesia del Carmen de abajo y Santa Catalina siendo de ésta última de donde salieron en procesión extraordinaria en horas de la tarde, el memorable domingo 28 de septiembre de 1884 con dirección oriente hacia la sede de la Catedral metropolitana, incorporándose en las afueras de la plaza el Santísimo Sacramento tomado del tabernáculo de la Parroquia del Sagrario, llevado en manos del Presbítero don Pedro Piloña, presidiendo la extraordinaria procesión de traslado a su nueva casa de veneración, la antigua “Parroquia Vieja”, la cual había permanecido clausurada desde 1784, es decir 100 años atrás exactamente.

Al frente de la procesión eran llevadas en hombros las principales imágenes de la Escuela de Cristo, siendo éstas la imagen del santo patrono, San Felipe Rómulo Neri, que había presidido la Escuela de Cristo durante más de 200 años, la que marchaba al frente, revestido de dos casullas, portando en sus manos las llaves del nuevo templo. Le seguía Jesús Nazareno a quienes, a inmediaciones de la plaza vieja se les unió la reliquia que sería la titular del templo, la Santa Cruz del Milagro.

Este acontecimiento permitió que la devoción y presencia de la imagen de Jesús Nazareno de la Escuela de Cristo trascendiera al lograr reorganizarse sus devotos en torno a la venerada imagen, empezó a ser colocada en altos tronos para su velación en la Cuaresma y Semana Santa en su propia capilla de pasión en el lado norte del templo, hasta que los vecinos del barrio de la Parroquia Vieja llevaron a cabo por primera vez la procesión el Lunes Santo el año de 1896, a 11 años del traslado, lo que culminó con la institución canónica de la Hermandad de Jesús Nazareno en 1924, la cual se encuentra vigente a la fecha, después de haber sido disuelta su ancestral cofradía al promulgarse el decreto de extinción en 1876.

Durante 49 años se celebró la llegada de la imagen al primigenio barrio citadino con un jubileo de tres días, siendo el último fin de semana de septiembre hasta el año de 1934, ocasión en que se celebró el Quincuagésimo Aniversario de Traslación, el cual culminó con una magnifica y multitudinaria procesión, el domingo 23 de septiembre de 1934. Al consultar las fuentes hemerográficas encontramos que en el extinto diario “El Imparcial”, en su edición del 21 de septiembre de 1934 se anunciaban los actos solemnes preparados por la Hermandad de Jesús Nazareno de la Escuela de Cristo instituida canónicamente en la Parroquia Vieja, con motivo de la traslación de la venerada imagen.

Según la fuente se celebró una misa solemne y primera comunión para niños en la que ocupó la cátedra el elocuente orador Pbro. Belisario Trejo.

A las 09:00 se cantó un Te Deum. A las 10:00 Hrs. se develó una placa conmemorativa en el lado sur del sotocoro, de 11 a 15 Hrs. hubo horas cantadas y a las 16:00 Hrs. se levantaron las andas desde su dosel saliendo Jesús en procesión por las calles del barrio acompañado de sus cucuruchos.

En el diario “El Imparcial” del Lunes 24 de septiembre de ese mismo año se informaba: “La procesión de Jesús Nazareno de la Escuela de Cristo salió de la Parroquia Vieja a las dieciséis horas con numeroso acompañamiento de fieles y de cargadores que anticipadamente habían solicitado conducir la imagen. Regresó al templo a las veintidós horas y media”.

De lo anterior se puede inferir que “cargadores” en la nota periodística se puede entender como cucuruchos con túnica y “anticipadamente “, se puede interpretar como un proceso de inscripción anticipado para organizar los turnos, al igual que los procedimientos para la Semana Santa. Al verificar el itinerario se constata que el retorno fue por la avenida de los árboles recorriendo parte del recorrido de hace 50 años en su diáspora inicial a su llegada al barrio de la zona 6.

Conforme a las fuentes documentales gráficas que se conservan de aquella fecha, las fotografías muestran la utilización de un adorno sobrio, creado por don Agustín Barreda e Hijos, en el que la imagen iba posada sobre la letra “H” central en el anagrama “JHS” que significa Jesús Hombre y Salvador, realizado a gran escala. Además se reporta el estreno de las cantoneras para la cruz, hechas en plata fundida, cincelada, esgrafiada y burilada, con piedras semipreciosas.

En tres de estas piezas se grabaron los nombres de los donantes y en la cuarta, que es la que va colocada en la parte del “traceptum” de la cruz, en donde la imagen posa sus manos, están grabados en la plata con letra cursiva, los siguientes nombres: “J. Agustin Barreda, J. Domingo Reyes, Fermin Granillo, Felipe Pineda, Benigno Galeano, Bonifacio Chacón, Feliciano Morataya, Eugenio Contreras, José Antonio Bran, Rufino Monzón, Toribio Plata, Tomás Cerna, Manuel Robles, Pedro Morales, Roberto Valenzuela, Francisco Saénz, Fernando Estrada, Manuel de J. Bran, Medardo Arévalo, Adolfo Roldán.”

Al verificar en los registros de fundación de la Hermandad que datan del año 1924, los nombres anteriores corresponden a la nómina fundacional de la junta directiva de la Hermandad de Jesús de la Escuela de Cristo.

Cincuenta años más debieron transcurrir para que nuevamente se conmemorara una nueva efemérides el 28 de septiembre de 1984, ocasión en que la imagen de Jesús Nazareno saliera nuevamente en procesión en el mes de septiembre por las calles del barrio de la Parroquia, aunque sin el esplendor de antaño, con el mismo fervor de los encargados de su culto y los vecinos quienes se prepararon durante los tres primeros viernes de ese año con horas santas y conciertos de marchas fúnebres, el cuarto y último domingo de ese mes para culminar las festividades, después de las misas dominicales se organizó la procesión conmemorativa que salió a las 11:00 Hrs. para recorrer nuevamente las principales calles del antiguo barrio acompañado de hermandades de La Antigua Guatemala, Quetzaltenango, San Juan Sacatepéquez, Escuintla, Mazatenango y las Hermandades de la ciudad capital, llegando hasta la parroquia de Candelaria a la cual ingresó, retornando de allí a su templo a las 18:00 Hrs.

La próxima procesión de Jesús de las Tres Potencias

La próxima procesión extraordinaria del nazareno de la Escuela de Cristo con motivo de su traslación deberá verificarse el 28 de septiembre de 2034 por el quincuagésimo aniversario de traslación, celebración en la que nuestros herederos escribirán una nueva página de oro en la historia devocional, que confirme la presencia e importancia de Jesús Nazareno de la Escuela de Cristo.

Juan Alberto Sandoval
Escuela de Historia, Universidad de San Carlos.

Salir de la versión móvil