Una de las mayores devociones y muestras de fe en el pueblo de Nuestra de Señora de Concepción del Valle de Las Mesas hoy en día «Villa Nueva» es sin duda la veneración de la Milagrosa y Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de Trujillo, pues es parte de la historia misma de ese histórico lugar tras su fundación desde hace ya más de 250 años.
Villa Nueva siempre fue un pueblo de paso para las personas que se viajaban hacia los distintos pueblos y lugares de la costa sur en Guatemala y fue así como muchas personas iniciaron a tener ese contacto y propician aquellos recuerdos «pasemos a visitar al Señor de Trujillo».
Sin duda alguna los testimonios de gratitud y devotos en la Parroquia de la Inmaculada Concepción son el principal referente para una enraizada devoción que llevo en tiempos lejanos a mucha personas a realizar sus visita en romerías.
Su festividad se instituye y celebra desde el día 16 de octubre de 1856 fecha en la que llega a Villa Nueva la Bula con la Bendición pontificia por parte del papa Gregorio XVI.
El recordado maestro Mariano de Jesús Díaz compone y obsequia una extraordinaria marcha fúnebre para el pentagrama sacro guatemalteco titulada «Jesús de Trujillo» y que es interpretada cada 4 domingo de cuaresma en su solemne cortejo procesional.
