Nuestra Señora de Soledad de Santo Domingo es una de las imágenes más antiguas y con un enorme arraigo histórico en su devoción.

La imagen: inspiración de una joven madre.

No se sabe con exactitud la fecha en que fue tallada la escultura de Nuestra Señora de la Soledad, pero se podría situar antes de 1580, pues el escultor autor de la imagen toma como referencia la obra del Pintor y grabador holandes Rogier Van Der Weyden (finales del siglo XV) lo que revela su antigüedad, utilizando como fuente el arte flamenco según relata el Doctor en historia Fernando Urquizu “.

Fuentes iconográficas de primer orden que nos permiten asociar fácilmente el rostro de la actual escultura patrona de la Cofradía de los Siete Dolores de la antigua iglesia de Santo Domingo a pinturas flamencas …”

Cuenta una leyenda que el escultor se inspiró para la realización de esta imagen en el dolor de una joven madre que enterraba a su hijo.

Es de destacar en la imagen de Nuestra Señora de la Soledad detalles muy diferentes al resto de imágenes en advocaciones de pasión, entre ellas:
Es la imagen mariana procesional de pasión más antigua en Guatemala, por lo que ha servido de modelo para otras de la misma advocación.
La talla mide. 1.60 metros aproximadamente sin su resplandor, llegando a casi 1.80 con el mismo, convirtiéndose en una de las imágenes de la Virgen María mas altas en Guatemala.
El cuerpo que constituye a Nuestra Señora de la Soledad no posee goznes ni articulaciones en sus extremidades superiores porque originalmente era una talla completa y probablemente de estofe, transformada a de vestir en la segunda mitad del siglo XVIII acentuando su antigüedad y creación especifica para ser una madre apesadumbrada en pos de un hijo muerto.
El encarnado de Nuestra Señora de la Soledad está provisto de una palidez inusual casi etérea que la hace única en nuestro ideario religioso.
En su cabeza una especie de toca o pañoleta tallada, en lugar de cabellera o simulación de pelo o bien el característico casco de algunas imágenes mas recientes.
Parpados amplios y bastante pronunciados y una nariz larga y afilada que parte de las cejas sin ninguna curvatura que muestra una fisionomía europea (Holanda, Bélgica) y muy parecida a la imagen de Nuestra Señora del Rosario, con lo cual sabemos que son esculturas contemporáneas. De ojos laqueados y no de vidrio, su conjuntiva muestra señales inflamatorios con múltiples vasos dilatados que refleja un llanto largo y profuso.
Posee en su rostro siete lágrimas las cuales hacen referencia a cada uno de sus dolores, detalle también único por su connotación.
Sus manos entrelazadas sostienen tres clavos, rodeándolas una delicada corona de espinas insignias de la pasión de Cristo.

El título «Nuestra Señora de la Soledad» y su advocación.

Cabe destacar que esta imagen es llamada con el titulo de NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD aún antes de 1585 ya que se tiene un documento datado con esta fecha que sustenta dicha advocación la cual también fue confirmada el día de su solemne consagración bajo palio el 22 de febrero de 1998 por lo que es la imagen titular bajo esta advocación en Guatemala.

La consagración de la Soledad de Santo Domingo

Después de solicitar los informes históricos y artísticos a la Escuela de Historia de la Universidad de San Carlos de Guatemala y al Centro de Conservación y Restauración de Bienes Muebles del Instituto de Antropología e Historia se pudo comprobar la antigüedad de la Imagen y de su Cofradía.

La Sagrada Imagen es Solemnemente Consagrada bajo palio el mariano domingo 22 de febrero de 1998 por el Arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago Monseñor Prospero Penados del Barrio(+) en el Altar Mayor de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario en una Sagrada Misa concelebrada con Fry Carlos Amado OP. Prior del Convento de Santo Domingo y Director Espiritual de la Cofradía.

Luego de este Solemne acto da inicio una Procesión que encabeza Nuestra Señora de la Soledad seguida por la Imagen del Señor Sepultado rememorando así el cortejo procesional en la época de la Colonia.

Marchas Fúnebres dedicadas a la Soledad de Santo Domingo.

Nuestra Señora de la Soledad de Santo Domingo cuenta con un amplio repertorio musical en su honor entre las que se puede nombrar:

Dolorosa Consagrada del maestro Pedro Donis
El llanto de la Virgen del maestro Brigido Porras
Los Tres Clavos del maestro Brigido Porras
Señora de Soledad de Santo Domingo del maestro Jose Antonio Padilla
Diario de Maria de Martin Valverde arreglos realizados por el maestro Christian Juarez.
Su marcha oficial es: La Dolorosa del maestro Salvador Rojo.