Anécdota de: Anónimo, quien en nombre puso «Recuerdos de hace 12 años sobre Jesús de san Bartolo»
Un saludo cordial a todos los hermanos y hermanas devotas de las imágenes de Jesús de San Bartolo y Virgen de Dolores.
Mi anécdota empieza hace doce años cuando atravesaba dificultades con mi hijo de tres años de edad quien se me enfermó gravemente, no teniendo trabajo y pasando muchas necesidades, porque solo mi esposa laboraba y era el único ingreso que teníamos.
Acudimos a nuestros padres quienes nos brindaron su ayuda económicamente y moralmente para los medicamentos de mi hijo, pasaron los días y el niño seguía igual.
Se acercaba la fecha de inscripciones en San Bartolo para el quinto domingo y por lo cual no tenía para poder solicitar mi turno, mi esposa, que siempre me ha apoyado y en esa ocasión prestó el dinero para que yo pudiera ir a solicitar mi turno que con ansias yo quería.
Así pues decidí irme el día sábado por la tarde y quedarme a velar en las afueras del templo y hacer mi respectiva cola para ser atendido, cual seria mi sorpresa que al llegar el sábado en la tarde ya habían muchos devotos haciendo su fila para quedarse a velar allí.
El día domingo se abrieron las puertas y nos empezaron a atender; al entrar al salón tuve la curiosidad y pregunté si habían turnos de salida todavía y la respuesta fue «si» solamente hay uno, sin dudarlo lo compré y luego caminé para abordar el bus que me regresaría a la capital.
Pasaron los días y mi hijo mejoraba poco a poco con los medicamentos, así pues llegó el Quinto Domingo de Cuaresma, salí de madrugada de mi casa solitario pues no contaba con recursos para llevarlos a ellos, llegué a la antigua y de allí me dirigí a la iglesia de San Bartolomé; nos ordenaron y nos dieron el ingreso a la iglesia, fue tanto mi asombro de ver la bella imagen de Jesús de San Bartolo que lloré como un niño, le di mil gracias por permitirme estar allí en ese momento y le pedí con toda mi fe y con todo mi corazón la sanación de mi hijo y por mi familia.
Cargué mi turno el cual hasta la fecha es soñado, salí de mi turno y me encaminé hacia un bus el cual me llevaría de nuevo a la capital y regrese a casa. La semana siguiente mi hijo se recuperó en su totalidad y afuera enfermedades, luego en la misma semana me dan una llamada para realizarme una entrevista de trabajo el cual me otorgaron; y aquí estoy hasta la fecha, hace ya doce años.
Transcurridos los años sigo adquiriendo mi turno con la misma inquietud, devoción, fe y felicidad como la primera vez, en una ocasión me topé con una persona, platicamos y es una de esas personas que para mi, merecen respeto, admiración y aprecio de amistad, ya que para se volvió mi amigo.
Le comentaba un sueño que teníamos con mi familia, el cual era siempre haber querido donarle la túnica al Señor de la Caída para un Quinto Domingo, me hizo la salvedad de que habían en espera varios, pero que realizara una carta solicitándole a la junta directiva y hermandad dicha petición, pues la realizamos con mi familia y fue aprobada mi solicitud lo cual lo tomamos con mucha felicidad y alegría.
El día 19 de septiembre del año 2016 se nos concedió realizar nuestro casamiento por la Iglesia en San Bartolo, exactamente el día de mi cumpleaños y ya con nuestros tres hijos, nunca se me olvidará el regalo de boda y cumpleaños que nos otorgaron Don Carlos Pellecer y la junta directiva de dicha hermandad, el cual se los agradecemos de todo corazón.
La túnica de JESÚS DE SAN BARTOLO fue elaborada por un artesano de antigua admirable y respetado por el excelente trabajo que realiza. Dicha túnica donada fue estrenada este Quinto domingo de cuaresma del año 2016.
Esto es lo mínimo que nuestra familia puede ofrendar al señor, a través de su bendita imagen, después de tantos milagros, de tantas bendiciones derramadas para con nosotros. Nunca en mi vida esperaba contar con este privilegio de poderle dar algo así a Jesús de la Caída, pero se me concedió hacer realidad un sueño bellísimo.
Para terminar, otra anécdota: el haber tenido la oportunidad y la dicha de levantar el anda en hombros con mi hijo ya de 15 años en el turno soñado de salida con la túnica donada el Quinto Domingo del año 2016.
Dios tarda pero nunca te olvida, la prosperidad y la salud llegan a tu vida, solo pídelo con fe y de corazón y el Señor Jesús de lo dará. Bendiciones, todo es obra de Él.
¿Qué anécdota tienes tu para contarnos? envíala, nosotros la compartiremos en esta página web.