La parroquia de San Lucas Sacatepéquez cuenta con gran variedad de imágenes muchas de ellas antiguas, siendo las joyas de nuestra parroquia la imagen de San Lucas Evangelista que data posiblemente desde la fundación de nuestro pueblo y sin duda alguna nuestra Consagrada Imagen del Señor Sepultado la cual se sitúa a finales del Siglo XVIII, siendo una imagen de dimensiones pequeñas y talla no académica, posee rasgos diversos que no permite situarla en un estilo específico.
El tesoro de la Parroquia de San Lucas Sacatepéquez
Según el historiador Johan Estuardo Melchor Toledola imagen del Señor Sepultado fue en un principio una imagen fija a una cruz o un crucifijo, posteriormente se le agregaron en los brazos gonces, que permiten realizar el acto de crucifixión, y los actos propios de la adoración de la cruz cada Viernes Santo.
Al apreciar tan bella imagen podemos darnos cuenta de las facciones muy marcadas como los orificios de los pies y las manos, la herida del costado, ojos cerrados, cabello y barba tallados y ensortijados, su rostro presenta paz en el sueño de la muerte, esperanza en la resurrección y con su sacrificio, la vida eterna.
No sabemos exactamente cuándo se dio por primera vez la Procesión del Señor Sepultado de la Parroquia San Lucas Sacatepéquez, ya que nuestros bisabuelos, contaban ya de ésta, desde mucho antes de 1907 que se ha venido celebrando el primer domingo del mes de Julio en nuestra parroquia
Pero la directiva de la Hermandad en el año 1986. Acordó celebrar el 80 aniversario procesional en el año 1987, basándose en el primer dato concreto, como lo es un permiso concedido por la Jefatura Política Departamental de Sacatepéquez, en una hoja de papel sellado del bieno 1906-1907, en la cual se concedió licencia al Señor Matías Las, quien ese entonces era el capitán de la cofradía, para sacar en Procesión la Imagen del Señor Sepultado, permiso dado el día viernes 5 de julio y la misma se realizó el domingo 7 del mismo mes y año.
A partir del año 1973 se tomó la decisión de invitar a otras hermandades para participaren las actividades del primer domingo de julio. La hermandad de la Consagrada Imagen del Señor Sepultado de la Parroquia San Juan Sacatepéquez, la primera en demostrarnos su hermandad y acompañamiento.
Con el correr de los años se ha incrementado la participación de diferentes hermandades de los distintos puntos cardinales de nuestro bellos país, tan lejanos como Chiquimula, San Pedro Carchá, Quetzaltenango, etc., en el año 2014 participa por primera vez la Hermandad de los Vía Crucis, Sonsonate, del hermano país de El Salvador.
Todos ellos han hecho de esta celebración algo muy grande y por sobre todo de muchas bendiciones de Nuestro Señor.
Ya desde el año 1987 la Hermandad tuvo la inquietud de empezar a trabajar por la consagración de la Venerada Imagen del Señor Sepultado de la Parroquia de San Lucas Sacatepéquez, pero no fue sino hasta el año 2006 un año antes del centenario procesional, que formalmente se retomó con más entusiasmo dicho acto, que con el asesoramiento del profesor Antonio Valenzuela (Q.E.P.D) y el apoyo del entonces párroco Rev. Edgar López Rosa.
Comenzaron los preparativos de la papelería para poder entregársela a nuestro vicario Episcopal de Sacatepéquez Monseñor José Ramiro Pellecer Samayoa. Para que tuviera a bien poder autorizar la Consagración de la Venerada Imagen del Señor Sepultado.
Después de una larga espera el 1 de julio de 2007 se consagra la imagen del Señor Sepultado de la Preciosísima Sangre “Monseñor José Ramiro Pellecer Samayoa, toma entre sus manos los santos oleos para ungir, frente, manos y pies, las campanas de la Parroquia de San Lucas Sacatepéquez anuncian con su sonar que la imagen está siendo consagrada, Monseñor coloca las cruces de consagración como signo externo que nos llevaría a recordar que ha sido solemnemente consagrado, los miembros de la hermandad colocan sus rodillas al suelo agradeciendo al Señor por tan grato don”
Jesús mismo es aquel a quien el Padre consagró y envió en el más alto de los modos (Jn 10,86). En Él se resumen todas las consagraciones de la antigua Ley, que simboliza la suya y en Él está consagrado el nuevo Pueblo de Dios
Jesús vivió su consagración precisamente como Hijo de Dios: dependiendo del Padre, amándole sobre todas las cosas y entregando por entero a su voluntad. Estos aspectos de su vida como hijos son compartidos por todos los cristianos.
Cada 1 de julio se conmemora su solemne consagración, un reconocimiento a la fe del pueblo católico, fe que no ha disminuido sino al contrario cada vez se extiende más la devoción a la Consagrada Imagen Señor Sepultado de la Preciosísima Sangre de la Parroquia de San Lucas Sacatepéquez.