Muchos se habrán dado cuenta que cuando te encontrabas dentro del perímetro de una procesión la señal de los famosos «Smarthphone» se caían, el plan de datos no respondía e incluso las llamadas no entraban. Muchos rumores e incluso expresiones curiosas salían en las filas de los cucuruchos y cucuruchas que acompañaban su procesión. La causa: Antenas.
La tecnología digital avanza rápidamente, sin embargo, tras arduo trabajo por evitar la saturación de conexiones, las telefonías aún no logran solucionar ésto; pero no es malo, tampoco es para decirles que han hecho un mal servicio. En países grandes pasa esto también, y la causa es simple: una saturación de línea, que es cuando hay ocasiones en que al tener un tráfico inusual de actividad, las antenas acaban por saturarse y dejar de funcionar correctamente.
Las antenas tienen un comportamiento normal de tráfico tanto de datos como de llamadas, pero en éstas fechas naturalmente hay un exceso de población concentrado en un mismo lugar, lo que ocasiona una inestabilidad en el servicio 3G y llamadas.
Por darte un ejemplo, cuando intentas llamar en Navidad o Fin de año, incluso cuando estás en un concierto; te darás cuenta que las líneas se saturan y ni un mensaje de texto puede salir de tu teléfono.
¿Solución?, las hay varias, la más sencilla es retirarse lo más que se pueda de una concentración masiva de personas. Podrías también conectarte a la red de datos móviles 2G, que aunque la conexión es mucho más lenta; por lo menos logras enviar un mensaje de ubicación a alguien o subir la foto que querías (pero no será inmediato).
Seguro quisiste subir una foto, un comentario o incluso un video a tus redes sociales pero no pudiste porque no lograbas conexión de datos; y no te preocupes, que no era porque Jesús o la Virgen no querían que lo publicases (o quien sabe, recuerda que nada se mueve si no es por su santa voluntad) sino que para éstas fechas, se saturan las redes.