HISTORIA DE LA DEVOCIÓN AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN SAN MARCOS
Con las apariciones de Nuestro Señor Jesucristo resucitado a Santa Margarita María de Alacoque (monja de la orden de la Visitación de Nuestra Señora, fundada por el jesuita San Francisco de Sales) en Francia, a partir del 27 de diciembre del año 1,673 inicia la historia de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús se expandió a pesar de las dudas y recelos de muchos.
El mismo Cristo profetizó que su Sagrado Corazón triunfaría a pesar de sus enemigos; y fueron los padres jesuitas los encargados de expandir la devoción por todo el mundo.
En el San Marcos del período de dominación hispánica, en el año de 1,780 la Cofradía del Señor del Huerto, más conocida también como Hermandad de la Transfiguración solicita al muy reverendo y muy religioso Padre Fray Pedro Clériga el aumento de guachivales, es decir misas de obligación que dicha agrupación debía celebrar durante el año, solicitud que fue atendida positivamente y las nuevas fiestas para dicha hermandad, aparte de la titular, velación de Jueves Santo y aniversario eran estas: San Miguel Arcángel (29 de septiembre), San Pedro Apóstol (29 de junio), Santiago Apóstol (25 de junio), San Joaquín padre de la Virgen María (16 de agosto, según la antigua liturgia), los Desposorios del Señor San José (26 de noviembre), misa del día de Todos los Santos (01 de noviembre) y el Sacratísimo Corazón de Jesús (viernes después de la octava del Corpus y el último domingo de junio)
Iniciándose aquí la entrada de esta dulce devoción al pueblo de San Marcos, quedando desde esas fechas perfectamente regulada en el sentir popular del pueblo.
La historia de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús crece en los hogares de San Marcos y es así como en el año de 1,810, el ciudadano don Francisco Cárdenas, regidor del ayuntamiento, hombre culto y devoto, otorga testamento y entre sus mandas forzosas (donaciones y contribuciones obligatorias a la Iglesia u otra obra pía), entre otras cosas,
Llega una considerable cantidad de 100 pesos para la hechura de una nueva Imagen de Jesús Nazareno adaptada al gusto y devoción imperante en esos inicios del siglo XIX (neoclásico), ciento cincuenta y dos pesos para la fundación de una cofradía para el sufragio de las ánimas –en especial la de él, sus padres y abuelos- y establece la fundación de una capellanía, la del Sacratísimo Corazón de Jesús, sobre un molino en tierras de su propiedad, valuado en seiscientos cincuenta pesos.
Una capellanía consiste en una fundación en la cual el capellán tiene derecho a cobrar el fruto de ciertos bienes a cambio de la obligación de celebrar misas y otros actos de culto, otorgada mediante testamento.
La capellanía del Sagrado Corazón en San Marcos
La capellanía del Sagrado Corazón de Jesús en San Marcos, otorgada por don Francisco Cárdenas y como responsable directa su mujer doña María de Barrios, fue fundada con la obligación de celebrar 12 misas meseras el cuarto domingo de cada mes, misa de la festividad de San Francisco de Sales (fundador de la orden de las visitandinas, a las cuales se apareció al Sacratísimo Corazón de Jesús) y Misa de la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús.
En dicha capellanía funcionó un oratorio en el cual fue colocada la Sagrada Imagen del Sagrado Corazón de Jesús, este oratorio estaba ubicado en la parte sur poniente de la Ciudad, muy cerca de lo que hoy es aldea Las Lagunas.
Los años transcurrieron en paz y la capellanía funcionaba con normalidad hasta que estalló la revolución liberal, la cual tenía como objetivo diluir el poder de la Iglesia Católica y servirse de sus bienes, incluidos los de las cofradías, hermandades, asociaciones y capellanías para fundar bancos estructurados a capricho de los dirigentes liberales.
Por lo que se suprime la capellanía del Sagrado Corazón de Jesús en San Marcos, mas no así su oratorio, que pervivió hasta el 18 de abril de 1,902 cuando el fatídico terremoto de San Perfecto vino a dar por los suelos todos los edificios de San Marcos, incluidos templos.
Por aquél entonces era cura párroco de San Marcos el recordado Padre don Cayetano Maldonado, quien recibió su formación en medicina y sacerdotal en Roma, amigo de infancia del General Justo Rufino Barrios y por ende hombre inamovible de su puesto eclesiástico, fue el artífice del restablecimiento de las antiguas devociones y tradiciones marquenses.
El Padre Maldonado, sin fondos para la reconstrucción de todos los templos y basado en la devoción al Sagrado Corazón aún activa en San Marcos y en la reciente consagración del mundo al Sagrado Corazón de Jesús por el Papa León XIII, en su encíclica ANNUN SACRO del 25 de mayo de 1,899; decide trasladar la Imagen al templo parroquial provisional (que duró en pie hasta la construcción de la actual Catedral) inaugurado en 1,906, según el cronista Coronel y Doctor Ignacio Alfaro; en dicho templo parroquial provisional la Sagrada Imagen es entronizada en el Altar Mayor, donde permaneció incluso ya construida la actual Catedral, hasta la modificación del Altar Mayor durante el Obispado de Próspero Penados del Barrio que quiso hacer el altar mayor más sobrio en base a sus interpretaciones del Concilio Vaticano II.
La fundación del Apostolado de la Oración
En el año 1,950 se funda la Asociación del Apostolado de la Oración en San Marcos, asociación de carácter internacional fundada en Francia a mediados del siglo XIX destinada a dar culto especial al Sacratísimo Corazón de Jesús, siendo su sección de varones la Hermandad del Señor Sepultado y la sección de damas la Hermandad de la Santísima Virgen de Dolores, que desde esa época es la encargada de su culto, quedando a cargo de la Hermandad del Señor Sepultado y Apostolado de la Oración, según los estatutos aprobados en el año 1,958.
El Padre Maldonado ideó una nueva forma de culto al Sagrado Corazón para que durante todo el mes de junio recibiera visitas y devociones, fundado los CULTOS, PRECES Y DESAGRAVIOS AL SACRATÍSIMO CORAZÓN DE JESÚS, con los niños de la doctrina (previos a recibir la primera comunión), para que todas las tardes del mes se rezara el Rosario y otras oraciones especiales ante la Imagen del Sagrado Corazón de Jesús.
A partir del año 1,917 es encargado una familia de cada niño de rendirle culto al Sagrado Corazón un día al mes, modalidad que ha permanecido así hasta el día de hoy, con la diferencia que en vez de ser las familias de los niños de la doctrina los encargados de rezar cada día, lo son familias y grupos devotos que año con año son tomados en cuenta por la Hermandad encargada.