Luego de 14 horas de recorrido, ingresaba Jesús de la Merced a su templo, escribiendo una hoja más en su rica historia de más de 365 años.
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Momentos únicos y demasiado emotivos se viven cuando suena Señor de la Merced y Jesús llega a la Puerta Principal del Templo y un show pirotécnico rompe el silencio de la Madrugada. Y no es para menos, fuimos afortunados, podremos contar que vivimos, participamos y fuimos parte de la Historia del Nazareno Mercedario.
El turno 83 toma su turno y escuchamos a los más de 150 músicos interpretar ¡Señor, Pequé! Una mezcla de tristeza y alegría nos invade al ver que el cortejo ha llegado a su fin, pero alegría al poder sido partícipes.
Al colocar a Jesús en su Dosel, se terminó el Cortejo Procesional, pero como dijo el Párroco Aguilar, aun faltaban actividades que realizar.
Horas más tarde, en un gran esfuerzo por parte del grupo de Colaboradores, fue reabierto el Templo, Jesús estaba en el Altar Mayor listo para recibir a sus devotos que llegaron a acompañarle en su ya tradicional velación de Agosto.
Un 5 de agosto más ha finalizado, un 5 de agosto diferente, ya que no pudimos acompañarle presencialmente, pero sí de corazón, con esa esperanza puesta en que a los pies del Nazareno Mercedario no tenemos nada que temer.
Habiendo finalizado una Velación más, un amigo me hizo una pregunta Para vos, ¿Quién es Jesús de la Merced?
Para un servidor Jesús de la Merced es mi fuente de inspiración, mi consejero, mi Nazareno de mayor devoción, Él es mi todo.
Quisiera terminar este texto con la misma pregunta: